Corona de reparación al Sagrado Corazón de Jesús

 

Corona al Sagrado Corazón de Jesús.

V. Deus in adiutorium meum intende.

R. Domine, ad adiuvandum me festina.

Glori Patri, etc.

V. Dios mío, ven en mi auxilio.

R. Señor, date prisa en socorrerme.

Gloria.

1.- Oh Corazón amabilísimo de mi Jesús, adoro humildemente la dulcísima amabilidad, que de un modo singular usáis en el divino Sacramento, aun con las almas pecadoras. Me pesa veros tan ingratamente correspondido, y deseo desagraviaros de las ofensas que recibís en la Sma. Eucaristía, de los herejes, infieles, y malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

2.- Oh Corazón humildísimo de mi Jesús sacramentado, adoro postrado vuestra profundísima humildad en la divina Eucaristía, ocultándoos por nuestro amor bajo las especies de pan y vino. Os suplico, oh Jesús mío, hagáis que esta bella virtud penetre en mi corazón; yo procuraré entretanto, desagraviaros de las ofensas que recibís en el Smo. Sacramento, de los herejes, de los infieles y de los malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

3.- Oh Corazón de mi Jesús, tan deseoso de padecer, yo adoro los encendidos deseos con que fuisteis al encuentro de vuestra Pasión dolorosísima, y con que quisisteis sujetaros a todos los ultrajes que habíais de recibir en el Smo. Sacramento. ¡Ah Jesús mío!, deseo con todo mi corazón desagraviaros de ellos con mi propia vida, y quisiera impedir las ofensas que desgraciadamente os hacen en la divina Eucaristía, los herejes, los infieles y los malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

4.- Oh Corazón pacientísimo de mi Jesús, yo venero humildemente aquella invencible paciencia, con que soportasteis por mi amor tantos dolores sobre la cruz, tantos ultrajes en la divina Eucarística. ¡Oh, mi Jesús!, ya que no puedo lavar con mi sangre aquellos lugares, donde fuisteis tan maltratado en uno y otro misterio, os prometo, oh sumo Bien mío, usar de todos los medios posibles, para desagraviar a vuestro divino Corazón, de tantos ultrajes, como recibís en la Sma. Eucaristía, de los herejes, de los infieles y de los malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

5.- Oh Corazón de mi Jesús, tan amante de nuestras almas en la institución admirable de la santa Eucaristía, yo adoro humildemente aquel inmenso amor, que os llevó a darnos por alimento vuestro divino Cuerpo y Sangre adorable. ¿Qué corazón no se enternecerá a la vista de esta caridad infinita? ¡Oh mi buen Jesús!, dadme abundantes lágrimas para llorar y reparar las ofensas que recibís en el Smo. Sacramento, de los herejes, de los infieles y de los malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

6.- Oh Corazón de mi Jesús, ávido de nuestra salvación, yo venero humildemente el amor, que os llevó a sacrificaros por nosotros en la cruz, renovando todos los días ese precioso sacrificio sobre los altares en la santa Misa. ¿Es posible que a vista de tanto amor no se encienda el corazón humano en la más viva gratitud? Sí, demasiado fríos somos, oh Dios mío; pero os prometo en el porvenir, hacer lo posible para desagraviaros de tantos ultrajes que recibís en este misterio de amor, de los herejes, de los infieles y de los malos cristianos. Pater, Ave y Gloria.

Aun rezando simplemente los seis Pater, Ave y Gloria precedentes, delante del Santísimo Sacramento con tal que el último se rece según la intención del Sumo Pontífice, se ganan 300 días de indulgencia por cada vez que se hiciere.

Oración tomada del devocionario El joven instruido, editado por san Juan Bosco